A menudo los cambios nos dan miedo y nos producen incertidumbre e inseguridad, pues lo nuevo, lo que está por venir, se nos escapa a nuestro control y parece como si estuviésemos a merced del futuro que no controlamos y que no sabemos lo que nos deparará. Hay veces que deseamos cambiar pero el cambio nos produce cierto temor ante la novedad que viene. A nuestro lado hay personas que actúan con seguridad y tienen claro qué es lo que quieren para su vida. No se quedan parados ante los cambios, sino que afrontan lo que está por venir con mucha confianza, y en ocasiones se convierten en punto de referencia y ejemplo de cómo hay que actuar y seguir avanzando en la vida. Comprenden con rapidez los cambios de ciclos y están preparados para asumir los nuevos retos y riesgos que comportan las decisiones.