Todos valoramos mucho nuestro tiempo y no nos gusta perderlo. Son muchas las actividades que diariamente hacemos y que vienen marcadas por el trabajo, las distintas responsabilidades familiares que tenemos, nuestras amistades, el ocio. Intentamos organizarnos lo mejor posible para que nos dé tiempo acudir a todo, aunque eso suponga tener que llevar un ritmo de vida bastante acelerado. Nos cuesta trabajo pararnos a contemplar lo que hay a nuestro alrededor. Hay muchos días que nos faltan horas y hay veces nos quedamos con la sensación de que no llegamos porque tenemos muchos frentes abiertos y no llegamos a todo lo que nos gustaría. Los días van pasando y hay ocasiones en las que decimos que la vida pasa demasiado deprisa, vamos pasando los días y hay veces que nos queda el sentimiento de que no avanzamos ni progresamos lo que desearíamos. Y es verdad que todo es cuestión de tiempo.